Evitar la trasmisión de la sangre en las otras partes del cuerpo
N° .777- Si es posible, se debe vendar la herida para que la sangre no se transmita a las otras partes del cuerpo y de la ropa.
N° .777- Si es posible, se debe vendar la herida para que la sangre no se transmita a las otras partes del cuerpo y de la ropa.
N° .778- Según la precaución obligatoria, cuando hay una herida en la boca o en la nariz del orante y la sangre se transmite a otras partes del cuerpo y de la ropa, la oración con ella es inválida; la misma ley existe para la sangre de las hemorroides internas que se transmiten en el interior del cuerpo a otras partes.
N° .779- La persona que tiene una herida en su cuerpo, y encuentra una mancha de sangre en ello o en su ropa y no sabe si esta sangre ha salido de su herida o se ha trasmitido externamente a su cuerpo, debe purificarla antes del rezo.
N° .780- Si hay varias heridas en el cuerpo de la persona de modo que todas ellas se consideren una sola herida, el orante no necesita purificarlas hasta que se sanen todas; pero si las heridas son separadas, debe purificar cada una de ellas tan pronto como se sane.
N° .781- La mancha de sangre cuya cantidad es menor que el tamaño de la uña del dedo pulgar está admitida durante la oración y se puede rezar con ella, a condición de que no sea sangre de menstruación o posparto, ni sangre de perro, de cerdo o de un animal de carne ilícita, ni tampoco sangre del incrédulo (según la precaución obligatoria).
N° .782- Si las gotas de sangre se dispersan en varias partes de la ropa o del cuerpo, la oración con ella es correcta, a condición de que la cantidad de toda esta sangre sea menor que el tamaño de la uña del dedo pulgar.
N° .783- Si la ropa tiene forro y la sangre se transmite de la tela al forro, la sangre trasmitida se considera otra mancha de sangre. Pero cuando la sangre se transmite de un lado de la tela al otro lado, esta se considera una sola mancha (a condición de que la tela no sea muy gruesa).
N° .784- Cuando se elimina la sangre cuya cantidad es menor que el tamaño de la uña del dedo pulgar, su sitio permanece impurificado y hay que lavarlo, aunque se puede rezar con ello.
N° .785- Si la ropa está ensuciada con otras impurezas (como la orina), la oración con ella es inválida, aunque su cantidad fuera mínima.
N° .786- Las ropas pequeñas con las cuales no se puede cubrir los genitales no necesitan ser puras durante el rezo; por ejemplo si el gorro, las medias, u objetos como el anillo o las gafas son impuros, la oración con ellos es correcta.
N° .787- Si el orante lleva consigo un objeto impuro (por ejemplo, una toalla impurificada que lleva en su bolsillo), la oración con ello es correcta, aunque este objeto pudiera cubrir los genitales. No obstante, la precaución recomendable es abstenerse de llevar objetos impuros durante el rezo.
N° .788- La mujer que cuida de niños que frecuentemente se impurifica su ropa con la orina de los niños y tiene mucha dificultad para conseguir ropa pura para cada oración, le es suficiente purificar su ropa una vez al día y no necesita purificarla para el resto de las oraciones. Según la precaución obligatoria, tales mujeres deben purificar sus ropas para la primera oración que realizan durante el día.