Lavar el rostro y los brazos desde arriba hacia abajo
N° .264- Hay que lavar el rostro y los brazos desde arriba hacia abajo; la ablución será anulada si lo hacemos desde abajo hacia arriba.
N° .264- Hay que lavar el rostro y los brazos desde arriba hacia abajo; la ablución será anulada si lo hacemos desde abajo hacia arriba.
N° .265- Para lavar el rostro y los brazos no es suficiente con mojarse la mano y pasarla por la piel, sino que la cantidad del agua debe ser tal que el agua fluya sobre la piel.
N° .266- Para obtener certeza de haber lavado el codo, se debe lavar el brazo desde una posición más arriba del codo.
N° .267- Generalmente la gente lava las manos antes de hacer la ablución, pero eso no puede ser suficiente para considerarse una parte de la ablución, entonces, después del lavado del rostro se debe lavar los antebrazos y las manos derecha e izquierda; la ablución será anulada si se lavan solamente las manos.
N° .268- En la ablución es obligatorio lavarse una vez el rostro y los brazos; como precaución obligatoria no debemos lavarlos como una segunda vez, y está prohibido lavarlos como tercera vez o más. Cada vez que lavamos el rostro o los brazos completamente vertiendo unos puñados de agua se considera como una sola vez del lavado.
N° .269- Después de lavar los brazos y las manos se debe untar la parte superior de la cabeza con la humedad que se queda en la mano, y según la precaución obligatoria hay que hacerlo con la mano derecha, y es mejor untarla desde arriba hacia abajo, pero también está permitido hacerlo en la forma contraria desde abajo hacia arriba.
N° .270- La posición de la unción es la parte superior y delantera de la cabeza, es suficiente untar en cualquier medida, pero la precaución recomendable es realizarla con tres dedos a lo largo en la medida del tamaño de un dedo.
N° .271- Se puede hacer la unción sobre la piel de la cabeza y sobre los cabellos crecidos en ella, pero la persona cuyo cabello es muy largo que cubre su rostro al peinarse, debe untar el cuero cabelludo, y es mejor abrir un surco entre los cabellos antes de hacer la ablución para que pueda untar fácilmente el cuero cabelludo.
N° .271- Se puede hacer la unción sobre la piel de la cabeza y sobre los cabellos crecidos en ella, pero la persona cuyo cabello es muy largo que cubre su rostro al peinarse, debe untar el cuero cabelludo, y es mejor abrir un surco entre los cabellos antes de hacer la ablución para que pueda untar fácilmente el cuero cabelludo.
N° .272- Luego de la unción de la cabeza hay que untar los pies, entonces con la misma humedad que ha quedado en las manos se debe untar la parte superior de los pies desde las puntas de los dedos hasta los tobillos; la precaución obligatoria es untar la parte superior de los pies hasta la unión del pie con el tobillo.
N° .273- Es suficiente untar los pies a lo ancho en la medida de un dedo, pero también es mejor realizarlo con tres dedos, aunque es recomendable untar los pies con toda la palma de la mano; entonces es mejor poner la palma de la mano sobre el pie y deslizarla un poco hacia el tobillo.
N° .274- Para la unción de los pies y de la cabeza, se debe deslizar la mano sobre ellos, entonces según la precaución obligatoria la ablución se anula si la mano se queda quieta en el lugar de la unción y la cabeza o los pies realizan algún movimiento debajo de ella, pero no hay problema si la cabeza o el pie se mueva mínimamente.