N° .1034- Los actos que rompen la forma de la oración (por ejemplo: el aplaudir, el saltar, etc.) anulan la oración, ya sea de modo voluntario o por olvido. Pero un acto que no rompe la forma de la oración como por ejemplo señalar con la mano, no anula la oración.
N° .1035- Si durante la oración, el orante permanece en silencio de forma que sale del estado del rezo, su oración será anulada. Pero, si el orante se quedara callado o hiciera algo y duda si esto anula la oración, su oración se considera correcta.
N° .1036- Comer y beber anulan la oración; pero si se quedan los restos de la comida dentro de la boca y el orante los ingiere durante la oración, la oración no será anulada.
N° .1037- Uno de los actos que anula la oración es dudar en el número de los ciclos de las oraciones de dos o tres ciclos. También se anula la oración cuando se duda entre el primer y el segundo ciclo de las oraciones de cuatro ciclos.
N° .1038- Si el orante añade o reduce uno de los actos esenciales de la oración ya sea voluntariamente o por olvido, la oración será anulada. Por ejemplo la oración será anulada si el orante añade o reduce una inclinación o dos prosternaciones en su oración. Sin embargo, la oración no será anulada si el orante por olvido aumenta o reduce un acto no-esencial de la oración (por ejemplo, una sola prosternación), pero si lo hiciera intencionalmente, su oración será anulada.
N° .1039- Si después de terminar la oración el orante duda si ha cometido uno de los actos que anulan la oración o no, no debe prestar atención a esta duda, pues su oración se considera correcta.
N° .1040- Es desaconsejable en la oración hacer cualquier acto que interrumpa el estado de la humildad; por ejemplo girar un poco el rostro hacia la derecha o la izquierda, no obstante si el giro fuera completo, la oración será anulada. También es desaconsejable jugar con la barba, jugar con los dedos de las manos y salivarse. Es desaconsejable en el momento de recitar la sura AI-Hamd o el Zikr quedarse en silencio para escuchar a otra persona. También, es desaconsejable rezar con ropas ajustadas o en el estado de somnolencia o cuando el orante necesita orinar o defecar.
N° .1041- Según la precaución obligatoria, no está permitido romper voluntariamente las oraciones obligatorias; pero se permite romper la oración para proteger la vida o los bienes propios de un peligro. Por ejemplo cuando un peligro amenaza la vida del orante o la vida ajena y no es posible evitarlo sin romper la oración, el orante debe romper la oración para evitar el peligro. Igualmente se puede romper la oración cuando una propiedad está en peligro; pero es desaconsejable romper la oración por una propiedad de poca importancia.
N° .1042- El momento de la oración, cuando el orante está rezando, si viene un acreedor a cobrar una deuda al orante, si es posible, debe pagarle durante la oración sin interrumpir el rezo; sin embargo, si no es posible hacerlo durante la oración, debe terminar la oración sin romper el rezo y pagar la deuda inmediatamente; pero si el acreedor no puede esperar debido a un problema, el orante debe romper su oración y pagarle su deuda.
N° .1043- Si durante la oración el orante se da cuenta de que la mezquita se ha impurificado, y se puede purificarla sin interrumpir la oración debe hacerlo; si no es posible, debe terminar la oración y purificar la mezquita inmediatamente luego de terminar el rezo. Según la precaución obligatoria, el orante no debe prolongar su oración en este caso.
N° .1044- Si el orante continua su rezo en aquellas circunstancias en que es obligatorio romper la oración (por ejemplo cuando la vida está en peligro), ha cometido un pecado y su oración será incorrecta.
N° .1045- Si antes de la inclinación el orante recuerda que no ha recitado el Azan o el Iqama, es recomendable romper la oración; recitar el Azan y el Iqama y luego realizar nuevamente la oración, a condición de que el tiempo de la oración sea amplio.
