El oro blanco
N° .255- Según la precaución obligatoria, el oro blanco tiene la misma ley que el oro amarillo normal, pero no hay problema en el uso del platino que es un metal diferente.
N° .255- Según la precaución obligatoria, el oro blanco tiene la misma ley que el oro amarillo normal, pero no hay problema en el uso del platino que es un metal diferente.
N° .279- Para hacer la ablución, también es posible sumergir el rostro, los brazos y las manos en el agua (como un estanque) con la intención de realizar la ablución, o poner la misma intención al sacarlos del agua; esto se denomina ablución por inmersión.
N° .283- En el momento de la ablución, es recomendable recitar las siguientes súplicas:Al inicio, cuando vemos el agua podemos recitar lo siguiente: “Empiezo la ablución en el nombre de Al-lâh, alabado sea Al-lâh, el que creó el agua pura y no la ha creado impura.”Al proceder en lavarnos las manos y antes de realizar la ablución, recitemos: “¡Dios mío! ponme entre quienes se arrepienten y entre ellos que están purificados.” Es recomendable enjuagar la boca con agua y recitar: “¡Oh Dios! entrégame mi prueba en el día de Tu encuentro y facilita mi lengua para mencionarte.”También es recomendable antes de proceder con la ablución, lavar el interior de la nariz recitando: “¡Oh Señor! No me prives de la fragancia del Paraíso; permíteme oler su fragancia, y su aroma divino.”Cuando empezamos a lavar el rostro, podemos suplicar: “¡Dios mío! Ilumíname el rostro en el Día del levantamiento cuando se ensombrecen los rostros, y no ensombrezcas mi rostro en el día cuando se iluminan los rostros.”Y al lavar el brazo derecho decimos: “¡Oh Señor! Dame la escritura de mis obras en la mano derecha y en mi mano izquierda la eternidad en el Paraíso y juzga conmigo con benevolencia.” Cuando lavamos el brazo izquierdo recitemos esta súplica: “¡Oh Señor! No me des la escritura de mis obras en la mano izquierda ni detrás a mis espaldas, ni la cuelgues alrededor de mi cuello; ¡Señor mío! Me refugio en Ti del susurro de los demonios.”Al untarse la cabeza podemos decir: “¡Dios mío! Cúbreme con Tu bendición, con Tu misericordia y con Tu perdón.”Y al final, en el momento de la unción sobre los pies recitemos: “¡Oh Señor! afírmame los pasos al caminar desde el Puente de Sirat hacia el Paraíso, en el Día del levantamiento cuando resbalan los pies; Te pido que me des fuerzas para lograr Tu complacencia, eres Tú de la majestad y la generosidad.”
N° .323- Si la persona ha tenido la ablución anteriormente y luego dudase si está anulada, no debe prestar atención a la duda y puede considerarla válida; al contrario, sí la persona no ha tenido la ablución y dudase si la ha realizado, debe realizarla.
N° .324- La persona que ha hecho la ablución y ha hecho también un acto que anula la ablución, como el orinar, y no sabe cuál se ha hecho primero, debe realizar la ablución de nuevo
N° .325- Quien siempre duda sobre la corrección de las etapas de la ablución y de sus condiciones, no debe atender a su duda y puede continuar el proceso normalmente.
N° .326- Si después de realizar la oración la persona dudase si había hecho la ablución, su oración será correcta, pero debe hacer la ablución para las oraciones siguientes.
N° .327- Si la persona mientras está rezando dudase si ha tenido la ablución, según la precaución obligatoria debe terminar la oración y después debe hacer la ablución y repetir su oración de nuevo.
N° .345- La persona que tiene una herida, una ampolla o una fractura en los miembros de la ablución, debe hacer normalmente la ablución con las condiciones siguientes:a) Que la herida sea descubierta.b) Que no contenga sangre.c) Que el agua no la perjudique.
N° .346- Si hubiera en el rostro o en las manos una herida, una ampolla o una fractura descubierta a la cual le perjudica el agua, es suficiente lavar alrededor de ella; no obstante, si es posible hay que pasar la mano húmeda sobre ella, si tampoco es posible, es recomendable poner una tela pura sobre la herida y pasar la mano húmeda por encima de ella.
N° .347- Si la herida, la ampolla o la fractura estuviera en el lugar de la unción de modo que no fuera posible untar sobre ella, se debe poner una tela pura sobre la herida y hacer la unción sobre ella, la precaución obligatoria en este caso, es hacer el Tayammum después de realizar la ablución; ahora la persona a quien no le es posible poner una tela sobre la herida, debe realizar la ablución sin la unción y según la precaución obligatoria debe también hacer el Tayammum.
N° .348- Si la herida, la ampolla o la fractura estuviera cubierta con tela, vendaje o yeso, si es posible hay que abrir el vendaje y lavar la zona lastimada a condición de que no le perjudique el agua; si no es posible, se debe lavar alrededor de la zona lastimada, aunque la precaución recomendable es pasar la mano húmeda sobre el vendaje; si el vendaje está impuro, se puede poner una tela pura sobre ella y pasar la mano húmeda sobre esta tela.